De las Agendas Urbanas locales a las Estrategias Territoriales Integradas: Un nuevo escenario de oportunidades para las ciudades y municipios

Agendas urbanas locales

Desde hace varias décadas, la Comisión Europea ha asumido un papel de apoyo a las ciudades, tal y como se refleja en su larga trayectoria de programas de ayudas FEDER al desarrollo urbano: desde las iniciativas comunitarias URBAN I y II (1993-1999 y 2000-2006), pasando por el programa URBANA (2007-2013) y las recientes Estrategias de desarrollo urbano sostenible e integrado (2014-2020) hasta las actuales Estrategias territoriales integradas (2021-2027).

La financiación asignada a dichas actuaciones ha incrementado de manera progresiva en cada uno de estos periodos de financiación, destinando el FEDER un porcentaje determinado de su financiación total al desarrollo urbano sostenible e integrado. En el actual periodo, supone un 8 % del total de dichos fondos lo que supone un incremento notable con respecto al anterior periodo (2014-2020).

Las Estrategias Territoriales Integradas: alineamiento y objetivos

En el periodo actual, el reparto de fondos destinados a favorecer el desarrollo urbano sostenible se ha traducido en la formulación de las estrategias territoriales integradas (ETI, en adelante) que, de alguna manera, suponen la evolución de las anteriores estrategias de desarrollo urbano sostenible e integrado (EDUSI) que marcaron el desarrollo de actuaciones urbanas en el periodo de programación anterior. La denominación de las ETI se recoge en los contenidos del Programa Plurirregional de España FEDER 2021-2027 (POPE, en adelante).

El desarrollo de las ETI se centra en el Objetivo Político 5 de la Política de Cohesión de la UE: “Una Europa más próxima a sus ciudadanos, mediante el fomento del desarrollo integrado y sostenible de todo tipo de territorios y de las iniciativas locales”. Además de su alineación al citado objetivo político, el principal objetivo de las ETI es fomentar el desarrollo sostenible e integrado de las áreas urbanas, desde una triple perspectiva: la mejora de la dimensión física y medioambiental; la mejora de la dimensión económica y la competitividad y la mejora de la dimensión social de estos territorios.

Reparto de fondos

Tras la experiencia de las EDUSI y tras haber identificado los principales problemas acontecidos en la ejecución de las mismas, se ha definido, de cara al reparto de fondos, un nuevo esquema de financiación que se adecúa más a la realidad municipal española; una realidad que es diversa en cuanto al tamaño y capacidades administrativas de los municipios. En base a este esquema de financiación los fondos se repartirán según tres modelos de desarrollo urbano:

  • El modelo de grandes ciudades de más de 75.000 habitantes, para las cuales se asignará entre un 20-30 % del presupuesto disponible.
  • El modelo de ciudades intermedias de entre 20.000 y 75.000 habitantes que recibirán del 40-60 % del presupuesto disponible.
  • El modelo de las áreas urbanas funcionales, constituidas por un área de un mínimo de 20.000 habitantes y una cabecera de, al menos, 10.000, a las que se asignará del 5-15 % del presupuesto disponible.

¿Qué será financiable para el 2021-2027?

Para determinar si una determinada operación es financiable, la primera comprobación será su encaje en una estrategia territorial. El POPE establece que en la nueva convocatoria de ayudas FEDER se van a financiar “planes de actuación integrados que deberán de estar previamente enmarcados en una estrategia territorial en ámbito urbano” (es decir, una Agenda urbana local u otro instrumento de planificación urbana similar).

Por tanto, el encaje estratégico con una Agenda urbana local (u otro instrumento similar) será no solo un criterio de valoración, sino un requisito en la citada convocatoria.

En este sentido, el POPE apunta lo siguiente en relación a las Agendas urbanas: “Bajo el esquema de una estrategia territorial basada en la planificación de las políticas públicas y en el proceso de participación de los actores locales (una participación que se garantizará no solo en la primera fase de planificación sino a lo largo de todo el periodo a través del mecanismos como los comités de seguimiento) se tendrán en cuenta los instrumentos que en los últimos años se han puesto en marcha, tales como los planes de acción local que se guían en su elaboración por el marco de la Agenda Urbana Española” (POPE, pág. 161).

Por tanto, disponer de una Agenda urbana local, elaborada bajo los criterios metodológicos de la Agenda Urbana Española, supone una ventaja de inicio de cara a la futura convocatoria.

Las Agendas urbanas locales

Las agendas urbanas locales (AUL, en adelante) son instrumentos o marcos de trabajo desde donde definir e implementar políticas públicas orientadas al desarrollo territorial. Dichos instrumentos nacen con la vocación de aterrizar los contenidos de las Agendas urbanas globales a la realidad local. Las AUL permiten establecer estrategias de carácter integrado con las que planificar estratégicamente las ciudades y municipios con la vista puesta en un horizonte a corto, medio y largo plazo, permitiendo encarar con mejores garantías los retos que dichos territorios tienen planteados. Además de definir la estrategia de un municipio o un área urbana funcional una Agenda Urbana debe de permitir:

  • Actualizar y realizar un diagnóstico de la situación de partida del municipio, donde se identifiquen de manera integrada los principales temas y desafíos que condicionan el presente y futuro de dicho municipio o ciudad.
  • Definir una visión de futuro o modelo de ciudad que disponga de unos objetivos, unos ejes de acción estratégica y unos proyectos con capacidad para configurar una estrategia propia y singular de la ciudad.
  • Poner en marcha un proceso de organización social orientado a mejorar la capacidad organizativa y de acción concertada entre los principales actores del municipio para afrontar fines comunes.
  • Establecer un sistema de participación que dirija la participación hacia el compromiso de acción entre dichos actores clave que les permita actuar de manera sinérgica y cooperar en el desarrollo de proyectos en el marco de la AUL.
  • Establecer marcos de coordinación entre las diferentes políticas sectoriales y de otras administraciones que permitan avanzar hacia la integralidad de las políticas públicas que convergen en la ciudad.
  • Definir un sistema de seguimiento y evaluación de la AUL.

 

En EOSA contamos con más de 15 años de experiencia dedicados a la planificación urbana y territorial, así como a la presentación y gestión de proyectos europeos, desarrollando metodologías propias que aplicamos en la elaboración de AUL, Planes estratégicos de ciudad y otros instrumentos de carácter estratégico. En la actualidad, asesoramos y damos apoyo técnico a un buen número de Ayuntamientos, Diputaciones y áreas urbanas funcionales en la elaboración e implementación de sus Agenda Urbanas.

En conclusión, las AUL, ciertamente, abren un escenario de oportunidades para las ciudades y municipios que no deberíamos de desaprovechar cometiendo antiguos errores. Oportunidades no solo de financiación, sino también para fortalecer la capacidad de organización y acción del conjunto de la ciudad en base a objetivos compartidos.

juan
Juan Arredondo.
Consultor de Planificación Estratégica Territorial